COMIDAS EN TIEMPO DE CRISIS


Tal y como he prometido la última vez que escribí en este blog, os presento una receta, es muy económica y lo voy ha explicar tal y como haría mi madre y las madres de casi todo el mundo:

                                                Pollo en tartera
 
Cortas un pollo   (éste de 1,300gr),  en varios trozos, lo pones en un recipiente el día anterior con un chorrito de vino, 3 dientes de ajo picado, una cucharilla de aceite de oliva, unas arenitas de sal y una pizca de orégano, y lo dejas macerar. Al día siguiente el la tartera en donde lo vas a cocinar, hechas 3 cucharas de aceite de oliva, así que está caliente metes el pollo y lo doras un poquito, una vez dorado le añades un vaso de agua templada, una cebolla, un pimiento rojo y tres zanahorias y con un chorrito de vino y lo dejas reducir durante una hora. Para ver si el pollo está cocinado le metes el tenedor y si pincha la carne hasta el fondo, es que está cocido. Apagas el fuego y lo dejas reposar un cuarto de hora antes de servirlo. Esta receta está en 4,50 € , yo la he hecho para dos personas. Las recetas de nuestras madres eran así de simples y no tenían medida.
 
Pobre de aquella persona que olvide sus orígenes, el pasado como el presente configura nuestra existencia.  Cuando estaba preparando esta cazuela de pollo que hoy os presento me vino a la memoria como nuestras madres, y estoy hablando de los años 50-60, preparaban los menús de la familia con cuatro duros. En mi casa no había el primer plato, segundo plato y el postre, no, había uno y abundante y a jugar hasta la merienda, que solía ser, pan con chocolate del gordo, en las casas  en donde la economía era un pelín mejor, en el resto era una  rebanada de pan de mollete con nata de la leche y azúcar "EL TULIPAN"  de los pobres, que no nos dabamos cuenta por que casi todo nuestro entorno era igual, estábamos igualados por la NECESIDAD. El martes comiendo con una amiga de la infancia que hacia años que no veía (esto de ser jubilada, entre otros privilegios está el de ponerte  al día  con los amigos que hace años que no ves), nos sirvió para recordar, entre risas, cuando conocimos el brócoli (que muchos piensan que nació en  Galicia de manera espontánea, la papaya, el aguacate y así un largo etc., que aunque no lo parezca, llegó con el cambio que tuvo este País hace unos años, y  al cual muchos no le dan importancia. Bicos y hasta la próxima

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