El pan y los ritos

 

Pan de leche condensada con semillas de girasol de panadería A Troia en Santiago de Compostela.

Démeter, diosa griega de la cosecha y la fertilidad, hizo un precioso regalo a la humanidad al desvelarle los misterios de la agricultura. Enseñó a los mortales a arar el suelo, a sembrar, a cuidar las plantaciones, a segar las mieses, a trillar, a almacenar y moler los granos, a convertirlos en harina y hacer el pan. Cuando su hija Perséfone fue raptada por Hades -señor de los infiernos- y conducida al subterráneo mundo donde moran los muertos, Démeter se sumió en una profunda tristeza que asoló la tierra: los campos dejaron de fructificar, las plantas se secaron  y sobrevino el hambre. La humanidad corría el peligro de desaparecer cuando  Zeus intervino: resolvió que, un tercio del año, Perséfone viviría con su madre en la Tierra, el otro tercio en el Hades y el resto en el Olimpo. Cada año el ciclo se repetía al igual que las estaciones se suceden; en el tiempo que Démeter recuperaba a su hija, la vegetación brotaba de nuevo y los campos se llenaban de cosechas -primavera- y al resgresar al averno, la desolación se adueñaba del paisaje - invierno- ...........Continuará    (del libro de José Carlos Capel). Y hoy me despido con unos versillos populares:

¿De qué te apuras, pelmazo,

-dijo a Roque su mujer_

si el chico nos va a traer un pan

debajo del brazo?

Puso fin al embarazo

un muchacho muy lucido,

y al ver el pobre marido

que salia sin el pan,

exclamó con mucho afán:

-¡Este ya se lo ha comido!